domingo, 31 de octubre de 2010

La Sonrisa del Faquir.

En ciertas circunstancias, lo más difícil es sonreír. Se trata, digamos, de la sonrisa del faquir ante el público: el tipo puede haberse tragado un sable teniendo la boca en llamas y el cuerpo perforado con agujas, pero al final sonríe.

                                   

Tal vez me equivoque,pero intuyo en las mujeres occidentales una sonrísa de faquir. Me explico:

No hace falta teorizar sobre el feminismo para constatar que las jóvenes profesionales suelen esgrimir un currículo academico más notable que el de los jóvenes profesionales. Las estadísticas dicen que en el mundo laboral las mujeres son al menos tan competentes como los hombres, y sobre eso, personalmente, no tengo dudas: mis mejores jefes han sido jefas.
Es sabido, sin embargo, que en conjunto las mujeres cobran menos que los hombres.Y no hace falta que me extienda en cómo funciona lo de la familia,los hijos,las tareas domésticas y demás.


La mujer no sólo tiene que ser mejor para ser igual , ya me entienden, sino que debe asumir una larga serie de funciones adicionales. Creo que sobre eso existe un cierto consenso. Pero hay más. Por una de esas circunstancias puñeteras en las que se especializa la historia de la humanidad, la relativa normalización del papel femenino en la sociedad ha coincidido con una época narcisista y vagamente frívola. Idealizamos la juventud,el cuerpo saludable,el éxito fácil. Y, encima, hemos desarrollado un concepto pintoresco de la felicidad, según el cual la acumulación de belleza física lleva a la beatitud espiritual. Si no la viéramos tan de cerca, esta época nos parecería rarísima.


                                            

De la manida "superwoman", por resumir a la mujer occidental de hoy, se espera que sea a la vez Miss Mondoñedo y doctora en Físicas, madre ejemplar y exploradora, amante e independiente , santa y seductora. Y que sea feliz , lo que, según el código social de la industria publicitaria, implica un régimen alimenticio más o menos eterno, la práctica frecuente de ejercicios agotadores, el uso exhaustivo de productors rejuvenecedores y el recurso ocasional a la cirugía. Es decir, un no parar de placeres. La juerga permanente. Con el complemento de la culpabilidad : toda omisión en el cumplimiento de esos deberes de la mujer moderna y feliz conlleva remordimiento, vago o punzante, según los casos.

¿Podemos añadir algo más? Sí,podemos. La sociedad occidental ha evolucionado,pero sigue siendo esencialmente machista. Sospecho que eso impone a la mujer un determinado grado de adecuación al universo onírico masculino,concretamente en el subapartado sexual. Conociendo como conozco mi propio universo onírico, eso ha de ser realmente complicado. Entretenido,tal vez, y hasta en alguna ocasión satisfactorio,pero complicado.

Al final de una cornada corriente tenemos a una mujer que ha trabajado más de doce horas, ha ganado menos dinero que su colega Ramón, se ha torturado con el pilates y ha ingerido una cantidad de calorías puramente simbólica. Misión cumplida. ¿Qué es lo que se espera ahora de ella? Que encima sonría. Que proclame, con un cutis impecable y un brillo de gozo en la mirada, que no hay nada como ser una mujer de hoy.

E.González.

viernes, 29 de octubre de 2010

When you were young.

Mary Poppins, Totoro , son películas que no podía dejar de ver una y otra vez.
Los caramelos Pez, escuchar a Xuxa, los Osos Amorosos.Hacer volteretas, bailar, maquillarme, hacer pompas, los vestidos con vuelo, reir, las hojas para cambiar (algunas hasta olían), el caramelo que aparecía en el cojín (que ponía nuestra profesora) cuando dormíamos la siesta en clase ,salir en las fotos haciendo el tonto.

El Ratoncito Pérez , desenvolver regalos (no importaba el regalo, pero sí que estuviera envuelto) , los caramelos que me daba mi abuelo, las excursiones del colegio, el corro de la patata, celebrar mi cumpleaños en el Manhattan jugando al escondite, pensar que la amistad iba a ser para siempre con cada nueva amiga que hacías...
                  

Pequeños detalles, grandes recuerdos.

domingo, 24 de octubre de 2010

500 Days.

...*Creo que es oficial. Estoy enamorado de Summer. Me encanta su sonrisa, su pelo, sus rodillas. Adoro la marca de nacimiento en forma de corazón que tiene en su cuello, cómo lame sus labios antes de hablar algunas veces. O el sonido de su risa, que es como cuando estás dormido. Escucho una canción de amor cada vez que pienso en ella. Me encanta cómo me hace sentir. Como si todo fuera posible, como... como si la vida valiese la pena*...
*Odio a Summer. Odio sus dientes torcidos, su peinado de 1960, odio sus rodillas huesudas, odio su lunar en el cuello que parece una cucaracha, odio la forma en que se moja los labios antes de hablar. Odio el sonido de su risa. ¡Odio esta canción!*

..·Tom finalmente aprendió que no existen los milagros. No existe tal cosa llamada destino. Nada está destinado a ser. Él lo sabía. Estaba seguro de ello ahora·..
http://www.youtube.com/watch?v=CHz31KjHAIM
[.Ésta es la historia de un chico que conoce a una chica. Pero usted debe saber que no es una historia de amor.]

sábado, 23 de octubre de 2010

A day in Madrid.

No hay nada mejor que pasar una tarde siendo turista en tu propia ciudad con personas que quieres.

Ayer fui una turista más en Madrid , disfruté de su cultura , de sus edificios , y de su noche , tan especial y tan mágica que hace que se pare el tiempo .



Vimos la exposición "Infancia" de Isabel Muñoz. Fotografías llenas de ternura y esperanza.



Más tarde visita a la exposición de Fellini , muchísimas fotografias de sus películas, alguna de ellas la conocida "Dolce Vita". También podemos encontrar videos y dibujos del director, fragmentos de sus películas y artículos de prensa.





Por último disfrutamos de la arquitectura...

Simplemente Madrid.